En este caso, el ejercicio consistía en elaborar un retrato con la técnica collage. Primero, partiendo de una imagen, se calca la silueta de la imagen con un calco cualquiera (preferiblemente el amarillo). Después, examinando bien los planos de color de la imagen que vamos a realizar, hay que recortar (de revistas, folletos, periódicos incluso) planos de color que se asemejen con los tonos que percibimos en la foto. Y, poco a poco, se construye la imagen. Para que la imagen tenga un cierto "parecido físico", debemos atender con especial atención a las zonas de luces, sombras e intermedias.
Y ese fue el resultado final de mi trabajo.
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